Tuvimos la suerte de explorar la increíble isla de Santa Cruz, en pleno corazón del archipiélago de Galápagos. Caminamos entre tortugas gigantes en su hábitat natural, observamos lobos marinos descansando tranquilamente en las playas volcánicas, iguanas marinas tomando el sol en las rocas negras, y pelícanos sobrevolando la costa en busca de peces. Un lugar donde la naturaleza es protagonista y cada rincón sorprende. Una experiencia mágica que nos conecta con lo salvaje, lo auténtico y lo verdaderamente especial de este planeta. ??

Una travesía diferente: comenzamos con un viento magnífico durante las primeras 24 horas, pero al final, las calmas ecuatoriales no nos perdonaron y pasamos muchos días navegando a motor. Aun así, vivimos momentos inolvidables: nos lanzamos al agua justo sobre la línea del ecuador y tuvimos la suerte de avistar algunos delfines en el camino?

Cruzamos el Canal de Panamá, toda una experiencia muy divertida y diferente.

0

Nuestra llegada a St. Vincent fue encantadora. Nos maravillamos al ver la exuberante isla verde. Exploramos una cascada con un lugareño, visitamos un sitio de rodaje de Piratas del Caribe y terminamos en un peculiar pub lleno de sorpresas. Antes de continuar hacia Los Roques, pasamos por Bequia, Mayreau y Union Island.

Explorar Santa Lucía nos llevó a descubrir Rodney Bay, una amplia bahía salpicada de playas, pero dividida por puertos y resorts exclusivos. Sin acceso directo a estos lugares de lujo, nos vimos obligados a rodearlos por caminos sinuosos, ansiosos por conocer las otras playas y sumergirnos en la vida de los lugareños. Nuestra última noche la pasamos en Pitons, el icónico símbolo de esta pequeña nación caribeña. Estas dos majestuosas montañas nos recibieron con su imponente presencia, ofreciendo una vista impresionante de la isla. Bajo su sombra, disfrutamos de la tranquilidad y la autenticidad de este rincón del Caribe, llevándonos recuerdos entrañables de nuestro viaje por estas tierras exóticas.

En esta isla, Martinica de belleza inigualable, nos sumergimos en las aguas cristalinas, rodeados de fascinantes criaturas marinas. Entre las Gorgonias y los peces globo, tuvimos el privilegio de encontrarnos con una majestuosa manta raya águila, que deslizaba sus suaves aletas en las profundidades. Se unió a nuestra tripulación una compañera más, dispuesta a compartir las maravillas de la navegación por el Caribe. Juntos, exploramos un tranquilo río durante una hora y media, caminando entre exuberantes paisajes naturales hasta alcanzar una hermosa cascada que parecía fluir directamente del corazón de la selva. También exploramos pintorescos pueblos costeros, impregnándonos de la autenticidad y la hospitalidad de sus habitantes.

¡Llegó el momento que estábamos esperando con ansias: Dominica y todo su encanto! Habíamos escuchado tantas maravillas sobre esta isla que la estábamos esperando con impaciencia. Y déjame decirte, ¡no nos decepcionó en absoluto! Nuestra aventura comenzó con una emocionante excursión por el rio Indian River, donde incluso se rodó una película de Piratas del Caribe. Navegar en canoa por estas aguas fue una experiencia verdaderamente espectacular. Gracias al coche que alquilamos, tuvimos la oportunidad de explorar el interior de la isla durante varios días. Con una única carretera serpenteando entre densa selva, cada curva nos ofrecía una vista más impresionante que la anterior. No podía apartar la mirada del paisaje mientras recorríamos caminos selváticos y verdes, llegando incluso a descubrir cascadas que nos dejaron sin aliento. ¡Una experiencia inolvidable!

Muy buenas navegantes, seguimos por el Caribe explorando las Antillas Menores, vamos rumbo a Guadalupe parando una noche en Montserrat. En Guadalupe llegamos a la Plage Petite Anse dónde el fondo marino es precioso y acabamos rescatando un tiburón nodriza de una nansa (jaula de pesca). Pescamos unos pezes en Dehia dónde hacemos la entrada del País y bajamos hasta Pigeon Islands, dos islas reserva marina que gozamos de un buceo maravilloso. Los últimos días los hicimos en Les Saintes, visitamos Terre de Haut y que bonito son estas islas, pudimos recorrerla por tierra y culturizarnos con el Fort Napoleon, antiguamente era una cárcel que fué reconstruida para hacer un museo dedicado a la historia, la cultura y el medio ambiente Les Saintes.

Seguimos navegando hasta llegar a St Kitts and Nevis, haciendo snorkel encontramos un pecio, pescamos unas langostas y descubrimos una playa hermosa donde cogimos unos cocos.

Llegamos a St Eustatius para hacer una parada de 2 noches y aprovechamos para hacer una excursión hasta el cráter de un volcán, pasando por los pueblos encantadores de la isla.

Con una nueva tripulante, María. Levamos ancla para seguir con el viaje, nos vamos a Saba. No era el destino que teníamos que ir, pero, el viento nos favorecía hasta Saba y la sorpresa de la vida, pasamos unos días increíbles en una isla prácticamente inhabitada y virgen al 100%. Nadamos con tiburones, tortugas, mantas, langostas y miles de peces distintos, realmente fue algo mágico. La conclusión: deja que la vida te sorprenda en cada momento, los planes cambian y para bien. Espero que disfrutéis de lo que vivimos en Saba.

Nos despedimos de Kika y navegamos hasta St Barth, fondeamos en la Plage Colombier, parece que estamos en Menorca y nadamos con tortugas y mantas... Excursión por la isla ??

0

Primeros días en el Caribe, toca hacer lavandería y compra del supermercado. Hacemos la entrada del país, pasamos el día en una isla muy pequeña con palmeras y celebramos el fin de año.

0

Ahora si que si, navegando entre las islas del caribe. Una llegada a St Martin con muchas emociones, alegría y poder decir que hemos cruzado el Atlántico. Algo increíble y muy emocionante. Que hermoso ver estas islas mientras te vas acercando, aparecen como cuadros pintados de verde y un azul precioso.

Recta final para estar en el Caribe, ya huele un poquito al caribe. Nos acompañan unos delfines hermosos, pescamos el primer atún y otro dorado, nos sigue lloviendo pero estamos felices y pasamos la navidad en el Sailing Katerina con una nueva familia que hemos formado.

Seguimos navegando, poco viento y varios días pasados por mucha agua, nos hace poner los trajes de agua y maniobras en primera persona.

Nos bañamos a 5.000 metros de profundidad, rompemos el spinnaker y brindamos por el Ecuador de la travesía.